Aunque parezca una película de ciencia ficción esta medida ya ha sido implantada por el fondo de inversiones más grande del mundo, Bridgewater. Por si fuera poca la controversia que había generado hasta ahora la extraña gestión de esta organización, hace algo más de un mes nos encontrábamos con una noticia si cabe más sorprendente, y es que la empresa ha optado por aplicar un programa de valoración entre compañeros y un software que toma decisiones de real transcendencia para la organización.
El "Proyecto Dots" consiste en que son los trabajadores de la empresa los que valoran a sus propios compañeros en una multitud de categorías, (los ítems son distintos según el puesto que ocupe el trabajador en la empresa) a través de un iPad que llevan consigo todos los empleados. Las cualidades se valoran del 1 al 10 y deben ir acompañadas siempre de un pequeño texto a modo de justificación de la respuesta. Esta herramienta, permite facilitar la toma de decisiones al departamento de Recursos Humanos.
Cada trabajador cuenta con un perfil, que puede ser visto por los miembros superiores de la organización, donde se puede consultar el "feed back" entre sus compañeros y él, y donde son destacadas sus fuerzas y debilidades.
Para fomentar el uso de esta herramienta, la organización otorga recompensas a aquellos empleados que son más activos y castiga o amonesta a los que por contra no lo son tanto.
No se sabe si este mecanismo será verdaderamente útil para medir y mejorar el rendimiento de la plantilla, ya que la hermeticidad de la organización, además de la cláusula de confidencialidad que deben firmar todos sus miembros impide que se conozcan datos al respecto.
Desde hace poco, se dice que la empresa Bridgewater ha implementado otra polémica herramienta que pretende: acabar con los mandos intermedios haciendo uso de la inteligencia artificial. Se asegura que este mecanismo en forma de software es un modelo algorítmico que toma decisiones a partir del estudio de los cerebros de distintos trabajadores de la empresa. El autómata proporcionaría a la empresa mayor rapidez en la toma de decisiones y evitaría el estancamiento ante situaciones de bloqueo.
Aunque estas medidas puedan ser útiles y viables, también es posible que puedan ser peligrosas en muchos casos. Al final, las opiniones de los compañeros son algo subjetivo, y que la permanencia de un trabajador dependa de la puntuación obtenida a partir de la valoración de sus compañeros, puede fomentar la permanencia de los más sociables y por contra la salida de trabajadores más válidos para la organización. Pero, ¿Serán más acertados los softwares que toman decisiones de tal envergadura como son la contratación o el despido? Es algo que solo conoceremos a través del tiempo.
Hola Carla, quizás el pionero Proyecto Dots sea una herramienta útil , aunque creo que no se ha tenido en cuanta el daño que los trabajadores pueden hacer a sus compañeros, no todos puntuaran con honestidad, la envidia es un elemento constante dentro de las organizaciones
ResponderEliminarHola Pilar, muchas gracias por tu comentario. Estoy de acuerdo contigo. No me parece la forma más justa de valorar el trabajo de una persona, al final la subjetividad es peligrosa.
EliminarGracias por tu comentario.
¡Hola, Carla!
ResponderEliminarTu entrada me parece realmente curiosa, no conocía las prácticas tan poco comunes de la compañía Bridgewater. En mi opinión, no estoy de acuerdo en que sean los empleados los que decidan, de forma más o menos directa, la continuidad de sus compañeros en la organización. El ser humano no es siempre objetivo y racional, y creo que en muchos casos los trabajadores podrían dejarse llevar por afinidades o desencuentros a la hora de valorar el rendimiento de los demás. Ignoro si se trata de una medida que esté dando buenos resultados, pero, definitivamente, no es de mi agrado.
Un saludo.
¡Hola, Paula!
EliminarMuchas gracias por tu comentario y por dar tu opinión.
Un saludo.